martes, 3 de abril de 2007

EL CAMINO

Hoy he vuelto a tomar el camino, como cada mañana. Ha amanecido y sin tiempo de darme cuenta a qué altura del mismo voy, continuo el camino... que en realidad no he abandonado en ningún momento, aunque lo haya querido hacer. Los días ya más largos dan a mi camino más sentido, deja de estar tan escondido y se vuelve tan rutinario como impredecible.

Buscando la maravillosa sensación de dejarse despertar por los aires veloces del amanecer, frescos con fragancia de mi propio aliento, continúo mi camino observando como el inevitable paso del tiempo no le quita el verde a mi senda.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Me pregunto cómo llegas al trabajo y no te quedas por esos bosques que cruzas, es una tentación...
Aunque no es mala manera de empezar el día, tendré que probarlo uno de estos días. lo prometo....